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martes, 13 de agosto de 2013

Beldadora o aventadora






A Casasola de Arión se la conoció durante muchísimos años como el pueblo de las aventadoras o beldadoras, igual que a Cantalejo, en la provincia de Segovia, se le conoció como el pueblo de los trillos, quien contó con una jerga especial de las personas que se dedicaban a la fabricación y venta de este apero agrícola, denominada gacería.
Una aventadora o beldadora es una máquina con la que se separaba el grano de las pajas y suciedad que contenía, después de haberse trillado en la era. Cuando no se contaba con esta máquina, había que utilizar la fuerza del viento para hacer esta labor: lanzar el grano hacia lo alto, para que el viento hiciera la función de separar éste de las impurezas. 
El funcionamiento de la maquina es sencillo: el cereal se coloca en una arqueta situada en la parte superior, y éste va bajando por su propio peso y el movimiento de la máquina a través de una ranura hacia un conjunto de cribas que se hallan unas por encima de otras a distintos niveles y que hacen un movimiento de vaivén. Este movimiento es producido por una biela que convierte el movimiento rotatorio de la polea en movimiento lineal. En un principio, mediante una manivela de movimiento manual denominada zanca, se movían unas aspas en el interior de un bombo, cuya misión es la de generar una fuerte corriente de aire, a modo de gran ventilador, que expulsaba hacia el exterior la suciedad que contenía el cereal, mientras que éste caía al suelo donde posteriormente se recogía en sacos. Con el tiempo se instalaron motores a la máquina para evitar el trabajo humano de dar vueltas a la manivela o mediante una correa se conectaba a la toma de fuerza de los tractores. 
Algunos pueblos de la provincia de Valladolid se dedicaron a fabricarlas, como Alaejos, Pedrosa del Rey o Tiedra, pero sin duda fue Casasola el gran referente en su fabricación. En los años cuarenta del pasado siglo logró contar esta localidad con unos20 talleres dedicados a la fabricación de aventadoras que se distribuían por todo España gracias a los más de 30 viajantes comerciales con los que contaban estas pequeñas industrias, a los que había que sumar los 5 con los que contó Pedrosa o Tiedra con 3 talleres, nos puede dar una idea de la cantidad de aventadoras que se producían en esta comarca vallisoletana. 
La aventadora representó toda una innovación que, junto a máquinas como la sembradora, la segadora y la trilladora, fueron produciendo una modernización de la agricultura en España. A mediados de los años 60 con la llegada de los tractores y las cosechadoras, se redujo la fabricación de beldadoras hasta su total desaparición, ya que esta misma función la realizaba la máquina de cosechar mientras segaba la mies.





2 comentarios:

  1. Buenos días a todos.
    Éste verano he visto una de éstas máquinas en un pueblo de Burgos, bien guardada por su antiguo propietario.
    Me ha gustado ver y leer vuestras explicaciones acerca de su funcionamiento así como de la capacidad de fabricación de unos talleres que no sé si habrán desaparecido en su totalidad ó quizá alguno se mantenga actualmente fabricando máquinas agrícolas diferentes. Seguro que estarían utilizando la hidráulica, que es lo mío.

    Salu2

    Juan Manuel Martín Barrenechea
    Ingeniero Industrial
    Tfno. Móvil...619.610.208
    http://www.maquinariahidraulica.com/

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  2. Hola buenas llevo un tiempo estudiando el funcionamiento de estas maquinas porque quiero hacer una en miniatura, mi pregunta es para que sirven las trampillas de los laterales, que en la mayoría de las fotos veo cerradas con una tablita?? Y la tabla de atrás que tien regulación?, que función tenía??

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